Cada obra de arte trae consigo una pequeña parte de la vida vivida,
transformada y reproducida por el artista para captar la atención del espectador.La química y la pintura convivieron a lo largo de su vida. Siempre desarrolló la actividad artística interponiéndola con la carrera de químico académico, especialmente durante los años en el extranjero o alejado de su familia. Profesor de Química Orgánica durante más de 30 años en la Universidad Ca ’Foscari de Venecia, impartió, entre otros, cursos sobre “Materiales de arte orgánicos” y “Pigmentos y colorantes” y escribió el libro de texto “Química orgánica para artistas y restauradores”.
Durante su estancia en Estados Unidos pudo observar de cerca las obras de A. Wyeth, fascinado por el virtuosismo de sus pinturas de “pincel seco”. Sin más detalles, inició una serie de experimentaciones que llevaron al desarrollo independiente de una original técnica basada en la acuarela donde la relación pigmento-aglutinante es óptima tanto por la transparencia, viveza y brillo de los colores. La trama pictórica obtenida con pinceles, papel y tela es particularmente adecuada para describir la superficie de naturalezas muertas, figuras y paisajes.
Las transparencias y los esmaltes obtenidos tanto de forma directa como mediante una cuidadosa eliminación de colores no se pudieron conseguir con otras técnicas de pintura. El resultado en cuanto a contraste y brillo es tan relevante que a menudo ha sido invitado a describir su técnica en academias e instituciones artísticas. Está permanentemente presente y representado por galerías de arte desde 1998.
Exhibiciones